RESÚMENES

El método arqueológico aplicado al conocimiento de épocas recientes: reflexiones sobre nuestra paradoja 
María José TORRECILLA GORBEA. Museo de Boinas La Encartada, UNED-Bergara
Aunque como profesionales hace ya tiempo que nos hemos venido enfrentando a los restos de cultura material de sociedades cada vez más cercanas en el tiempo -cuando no de la propia del arqueólogo-, como comunidad científica parecemos vivir de espaldas a este hecho. Cualquiera de nosotros dirá de sí mismo que es prehistoriador o medievalista, arqueólogo de intervención o patrimonialista, especializado en castillología o en tecnología… pero prácticamente ninguno se declarará arqueólogo de la contemporaneidad. En términos formales aún nos resulta paradójico unir arqueología y hecho reciente, a pesar de que a todos los efectos, actuamos de una u otra forma sobre estratos y contextos de cronología cercana en casi un 80 % de los casos.
Si no hacemos el esfuerzo por superar este lugar común (se practica pero no se hace visible) la paradoja seguirá instalada en los resultados de nuestros estudios y las aportaciones enterradas bajo etiquetas que enmascaran su verdadero valor. Reflexionemos sobre la orientación y las contribuciones que se vienen realizando en este ámbito y busquemos la forma de desterrar la contradicción teórico-práctica.

La Ferrería de Urtubiaga: Evolución de un espacio productivo desde el Medievo al siglo XX
Unai AURREKOETXEA FERNÁNDEZ. Haedera2000
El conjunto Ferro-molinero de Urtubiaga, se sitúa en la margen izquierda del arroyo Argienerreka, a un kilometro aproximado rio arriba con respecto al núcleo principal de la población, en el barrio de Olak. Se trata de un conjunto en el que se conservan los restos de la ferrería, el molino y las casas adosadas a estos. Nuestro trabajo, desde el punto de vista de la intervención arqueológica, se centro en la excavación de la zona del taller de la ferrería, y paralelamente, se realizó una labor de vaciado documental, que nos ha permitido rastrear el origen de este conjunto hasta situarlo en el siglo XV, frente a la datación que manejábamos al inicio de la intervención que lo situaba en 1725. La excavación arqueológica del taller, además de documentar algunos de los elementos propios de una instalación de este tipo (destacando el horno por encima del resto), posibilitó la constatación de la pervivencia de este espacio productivo una vez abandonada la actividad ferrona, ya que se recuperó un pozo de cestero de cronología contemporánea. La documentación arqueológica de los elementos relacionados con la actividad cestera, supone, por un lado, una de las pocas referencias arqueológicas vinculadas a esta actividad, y por otro, dada la cronología del mismo, un buen ejemplo de arqueología de época reciente.

Ferrería y pozo cestero en Urtubiaga en Ea (Bizkaia) (c) Unai Aurrekoetxea

Ferrería y pozo cestero vaciado en Urtubiaga en Ea (Bizkaia) (c) Unai Aurrekoetxea


La Arqueología de las fortificaciones de Época Moderna en el País Vasco. Una parcela casi desconocida de nuestro Patrimonio
Alfredo MORAZA BAREA. Aranzadi Zientzien Elkartea/Sociedad de Ciencias Aranzadi
A lo largo de los últimos tiempos la Arqueología se está abriendo a nuevos campos de conocimiento e investigación. Es en este contexto donde la Arqueología de la Época Moderna está comenzando a descollar como una disciplina propia e independiente. Uno de esos novedosos campos es el referido a la Arqueología del Poder (otrora conocida como militar), representada tradicionalmente por castillos y casas-torre pero que en un contexto más reciente como el que nos ocupa se ha centrado en una serie de fortificaciones y recintos amurallados. Unas construcciones que usualmente han sido obviadas y minusvaloradas, o a lo sumo abordadas desde una perspectiva meramente documental. Durante los últimos años distintas intervenciones arqueológicas desarrolladas en nuestro entorno les ha devuelto su papel protagonista. Convirtiendo además algunas de ellas en referentes patrimoniales de sus localidades. Entre esas intervenciones podemos hablar de las realizadas en los recintos amurallados de Donostia-San Sebastián y Hondarribia, en las fortalezas de Gazteluzar (Irun), Atxukale (Mutriku) o Torreatze (Pasaia) o ya más recientemente en los fuertes de La Galea y Arrigunaga (Getxo) o de Serantes (Santurtzi). Esta comunicación pretende dignificar una parcela de la Arqueología a la que hasta ahora apenas se prestaba atención, poniendo las bases para nuevos estudios.

Vista aérea del Fuerte de La Galea (Getxo, Bizkaia) (c) Alfredo Moraza

Vista aérea del Fuerte de Gazteluzar (Irún, Gipuzkoa) (c) Alfredo Moraza


De San Juan a San Miguel: una cabaña de pastores de La Mesta en Valderejo. (Valdegovía, Álava) 
F. Rafael VARÓN HERNÁNDEZ. Ondare Babesa S.L. EI-SEV
Durante el verano de 2011, se afrontó la documentación arqueológica de una cabaña de pastores del Honrado Concejo de la Mesta en el Parque Natural de Valderejo (Álava). La presencia de estos ganaderos, durante la segunda mitad del siglo XVIII y parte del XIX, supone la existencia de restos físicos de notable entidad en esta zona, además de la subsistencia de un buen número de topónimos relacionados con su actividad. Si bien la trashumancia de largo recorrido no ha sido una práctica común en el norte de la Península Ibérica en general, ni en esta parte de Álava en particular, estos testimonios suponen la excepción a esa regla. El estudio particular de esta modesta construcción nos va a permitir describir , brevemente, el entorno arqueológico del Valle de Valderejo, detallar la actividad mesteña, e insistir en la necesidad de aumentar el conocimiento de los elementos antrópicos dentro de espacios protegidos con un alto valor natural, pero también histórico y patrimonial. Finalmente abordaremos los problemas de conservación y puesta en valor de este lugar concreto, en el que las condiciones naturales –entre otras- no propician su buen mantenimiento.

Cabaña de Pastores antes de la intervención, Valderejo (Álava) (c) Rafa Varón

Interpretación de los restos localizados en Valderejo (Álava) (c) Itxaso Azcune, Rafa Varón


Crecimiento vertical, expansión horizontal: arqueología marítima de los muelles de Bilbao 
José Manuel MATES LUQUE. EI-SEV
En 2012, el Ayuntamiento de Bilbao llevó a cabo la reparación y rehabilitación de algunos tramos de los muelles de Bilbao, realizándose también un control arqueológico. El actual cauce de la ría no es el que existió desde sus inicios; la ribera natural se ha ido modificando según la necesidad de crecimiento urbano mediante un conjunto de estructuras portuarias para tal desarrollo, evolucionadas según los años: reclamación de ribera para espacio de carga y descarga, muelles, raíles de grúas y tranvías, norays, arganeos … El control documentó los elementos sobre los que la obra civil incidió; en este caso la obra fue de poca profundidad por lo que los “posibles” restos más antiguos estarían más enterrados y alejados del cauce actual. Los restos más recientes documentados consisten en vías para grúas, vagones y tranvías, el antiguo suelo de adoquines del s. XIX y, quizás lo más interesante, haber podido ver la antigua isla de Uribitarte, desaparecida en 1870. Esto no ha de hacernos olvidar que los restos materiales de nuestro pasado más reciente también constituyen una fuente de conocimiento enriquecido con los fondos documentales de archivos y autoridades portuarias y nos permiten entender el desarrollo de la ciudad que pisamos.

Arriba y abajo, restos de los antiguos muelles de la Ría de Bilbao, (c) José Manuel Mates Luque
 


La arqueología del conflicto: el estudio de episodios bélicos del siglo XX
Francisco José VALLE DE TARAZAGA. Aditu. EI-SEV
En los últimos años el desarrollo de las técnicas arqueológicas como métodos para el conocimiento de acontecimientos más allá de su valor histórico ha conseguido que esta ciencia se convierta en una metodología en sí misma para la recuperación de la información, sea esta en el marco de una investigación arqueológica o no. De este modo, se han generado en algunos países europeos algunas ramas de la práctica arqueológica dentro de las disciplinas legal y forense, entre otros. La arqueología forense, es decir la investigación de hechos recientes aplicando las técnicas arqueológicas de recuperación de la información se ha puesto en práctica en lugares como el Reino Unido, Ruanda e incluso, de manera menos formal, en el Estado español. Este devenir ha influido en la conformación de la arqueología del conflicto, una rama del saber arqueológico que investiga los escenarios materiales de conflictos recientes. Si bien es cierto que en nuestro entorno los escenarios militares del pasado han sido objeto de investigaciones en el mundo de la arqueología desde los tiempos de Schulten y el sitio de Numancia, los condicionantes especiales de las conflagraciones más recientes han hecho que conflictos como la Primera y Segunda Guerras Mundiales u otros conflictos se hallan dejado a un lado. Estos condicionantes, tales como las sensibilidades y reticencias, los elementos políticos y nacionales, o bien otros de tipo más pragmático como el tratamiento y retirada de explosivos y otros elementos peligrosos, la exhumación y custodia de restos humanos recuperados con familiares directos aún vivos, hace que la arqueologia del conflicto se convierta en una disciplina apasionante pero que requiere una estruturación y práxis específica. Alistando una serie de ejemplos, esperamos ilustrar esta nueva realidad arqueológica y su práctica actual.

Exhumación del cadáver de un soldado australiano en la batalla de Messines (Bélgica), I Guerra Mundial, (c) Fran Valle de Tarazaga


Heridas de Guerra. Excavación de trincheras de la Guerra Civil en el Monte Murugain (Aramaio) 
Etor TELLERIA SARRIEGI. EI-SEV
En las dos campañas de excavaciones arqueológicas realizadas en el monte Murugain, hemos sacado a la luz diferentes tramos de la muralla de la Edad del Hierro que rodeaba el monte por su lado sur. Aprovechando la existencia de esta endeble muralla a modo de parapeto, se trazó en paralelo una línea de trinchera durante la Guerra Civil Española, cuya excavación ha proporcionado abundante material bélico, objetos metálicos y restos de latas de comida. Todo ello nos ha llevado a indagar en la particular microhistoria de estas trincheras e iniciar de este modo, una interesante línea de investigación dentro de la llamada Arqueología de la Guerra Civil. La estratégica situación en la frontera entre Araba y Gipuzkoa y la ubicación en altura, hace que Murugain se convierta en un enclave fortificado en diferentes épocas de la Historia, lo cual ha dejado su inconfundible huella en el paisaje. Siguiendo esas huellas del pasado, se han planteado dos campañas de investigación arqueológica donde se ha apostado por llevar a cabo una Arqueología contemporánea, dinámica y abierta a la participación del público mediante jornadas de “Auzolan” y diferentes actividades de difusión.

Muralla de la Edad del Hierro en Murugain (Aramaio, Álava), (c) Etor Telleria

Trinchera de la Guerra Civil en Murugain (Aramaio, Álava), (c) Etor Telleria

Estudio Arqueológico de un campo de batalla de las Guerras Carlistas (Somorrostro 1874): Base metodológica y primeros resultados
Jesus Angel ARRATE JORRIN. 
La aparición de nuevas tecnologías cada vez más accesibles, están complementando eficientemente los estudios tradicionales de Arqueología. Entre estas mejoras se puede citar el desarrollo y evolución de Sistemas de Información Geográfica (SIG), los Sistemas de Posicionamiento Global (GPS) y aparatos asociados a los estudios geofísicos. Estas herramientas forman parte básica de los estudios que actualmente se están desarrollando dentro del ámbito de “Arqueología militar” y específicamente de los trabajos sobre los “campos de batalla”, nueva disciplina que cuenta con un inusitado interés mediático. 
En la comunicación se presentan los resultados del primer trabajo que de forma específica aborda el estudio un campo de batalla de la Guerra Carlista con metodología arqueológica en la CAPV. Los trabajos realizados sobre los restos físicos dejados tras las denominadas genéricamente “Batallas de Somorrostro”, acaecidas entre febrero y abril de 1874, han sentado las bases de una metodología de trabajo eficiente, con resultados sumamente enriquecedores y notablemente prometedores en un ámbito que trabajo que hasta fechas recientes quedaba fuera de los “estudios arqueológicos tradicionales”; donde además de la recuperación de un “patrimonio bélico”, la interpretación de los hallazgos permite la generación de un discurso histórico propio, complementario o incluso novedoso respecto al producido por las fuentes históricas, dentro del contexto de un episodio de relevancia del siglo XIX, como fueron las Batallas de Somorrostro.

Prospección con catas, (c) Jesús A. Arrate Jorrin

Material bélico recuperado, (c) Jesús A. Arrate Jorrin

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